Las biografías (biopics) están de moda en Hollywood. Cole Porter ('De-Lovely'), Alejandro Magno, Jesucristo ('La pasión de Cristo'), las aún no estrenadas 'Ray' (sobre el músico Ray Charles) o 'Kinsey' (sobre Alfred Kinsey y su revolucionario informe), y ahora el millonario Howard Hughes en 'El aviador'. Películas que suenan para los Oscars aunque, en mi opinión, ninguna de las estrenadas merezca mucho la pena. Ni siquiera esta última, aunque quizá sea la mejor de todas.
El problema de 'El aviador' es que no consigue hacer interesante algo con tan poco atractivo para un servidor como es la vida de Howard Hughes y su afición por los aviones y las mujeres. Si una buena película es aquella que consigue emocionar, interesar, seducir, conmover, fascinar... independientemente del tema tratado, entonces 'El aviador' no es una gran película. A pesar de estar dirigida con la habitual garra narrativa y poderoso sentido visual de Scorsese, de tener unas buenas interpretaciones y de deslumbrar con su inmejorable reconstrucción de época, la película no pasa de ser una correcta ilustración de la vida del magnate Howard Hughes.
Lo mejor: La reconstrucción histórica y la interpretación de la estupenda Cate Blanchett haciendo de Katharine Hepburn.
Lo peor: Que se hace demasiado larga.
Momentazo: El excelente comienzo de la película que nos hace mantener unas expectativas que luego acaban en parte defraudadas.
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