Al igual que en sus anteriores películas ('Delicatessen', 'La ciudad de los niños perdidos', 'Alien Resurrección', 'Amelie'), Jean-Pierre Jeunet demuestra en 'Largo domingo de noviazgo' que su talento visual es inmenso, que tiene una poética personal y una sensibilidad muy especial. Pero... a Jeunet le cuesta contar una historia.
A diferencia de 'Amelie' o 'La ciudad de los niños perdidos', que eran historias mucho más libres, 'Largo domingo de noviazgo' es esclava de la novela que adapta. Y lo hace de forma confusa, sobre todo en lo que se refiere a la investigación.
Es una pena que una película llena de grandes y poéticos momentos (atención al streptease a la luz de las cerillas) se vea perjudicada por una narración farragosa, atropellada, que amenaza en algunos momentos con terminar con la paciencia del espectador.
Lo mejor: Los arrebatos poéticos tan característicos de Jeunet y la fascinante reconstrucción de la Francia de los años 20.
Lo peor: Lo mal contada que está y lo mucho que perjudica el esteticismo del director a las escenas de guerra, muy poco impactantes desde un punto de vista dramático.
Momentazos: El streptease a la luz de las cerillas y el emocionante final.
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