Como si de una versión gay del cine de Larry Clark se tratara ('Kids', 'Ken Park', 'Bully'), 'L.I.E' tiene lo mejor y lo peor de ese cine indie de temática homosexual que despuntó en los años 90 con películas como 'Mi Idaho privado' o 'Vivir hasta el fin'. Lo mejor es su valentía artística, tanto formal como temática, capaz de tratar asuntos como la pederastia o la prostitución homosexual adolescente con inteligencia y sensibilidad, sin caer en el morbo o en la moralina fácil. Lo peor es lo desfasado y trillado que resulta diez años después ese look sucio y desaliñado o esas metáforas tan gastadas sobre el vacío existencial.
Lo mejor: Brian Cox. El veterano actor de películas como 'Troya' o las dos partes sobre el agente Bourne, hace gala de su inmenso talento en una de sus más arriesgadas y valientes interpretaciones.
Lo peor: El cansancio que provoca ver por enésima vez ciertos estilemas del cine independiente americano.
Momentazo
La escena donde Big John (Brian Cox) afeita a un imberbe Howie. Llena de una ambigüedad moral y sexual muy rica en matices. ¿Figura paternal o viejo verde pederasta?
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